22 Jul Esta claro, DIKA mola con corona o sin corona
Febrero de 2020 a las puertas de un año prometedor y brillante lleno de proyectos y promesas de crecimiento (de hecho acabábamos de ampliar la plantilla). Por aquel entonces casi nadie hablaba del coronavirus, lo veíamos como algo ajeno que ocurría muy lejos en una ciudad China e incluso algunos hacían chistes y bromas en la distancia sobre murciélagos e incompetencias orientales, tildándolo de «virus chino».
Nosotros para celebrar el carnaval malagueño que acababa de comenzar y para recibir por todo lo alto la nueva incorporación de Enrique (como dikateamer) decidimos hacer una coronación muy loca, bizarra y por todo lo alto (la sesión fotográfica realizada por Lefoto es buena prueba de ello).
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Quién nos iba a decir que esa sesión tan animada llena de abrazos y repleta de contacto social risas y aproximaciones (hoy mal vistas y perseguidas) serían el preludio de una pandemia colosal con forma de coronavirus. En este caso coronas oscuras muy distintas de las brillantes que nosotros ya portábamos de manera casi premonitoria, capaces de generar un caos mundial sin precedentes, llenando cementerios y UCIs a lo largo y ancho del planeta.
¿Casualidad? ¿Precogniscencia? A nostradamus lo encumbraron por menos. La cuestión es que ahora esa sesión adquiere mucho más sentido del que tuvo en su momento. En el fondo creo que estábamos celebrando nuestros últimos días de abrazos y de despreocupación social protegidos bajo brillantes coronas, que pronto se tornarían en dolorosas espinas con desbastadores efectos. El virus del miedo que nos encerraría llevándose por delante a un montón de compatriotas, sueños y dolor. Covid 19 sacó lo mejor y lo peor de cada uno, policías de balcón, periodistas de visillo, analistas de redes, desinformación y una galopante falta de sentido común en la mayoría de decisiones individuales y colectivas. Una vez más quedó patente la debilidad de nuestra especie y de su complicado engranaje social capaz de estallar en pedazos de golpe ante la mirada atónita de ciudadanos, líderes y gobernantes.
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Nosotros llegamos a celebrar un gabinete de crisis interno mezclando la seriedad de las decisiones que fuimos tomando con el mayor sentido común según la información que nos llegaba pero sin perder nuestra actitud vitalista, creativa y propositiva ante los problemas, el miedo irracional y las histeria son siempre malos consejeros.
Y es que en DIKA tenemos experiencia llevamos más de 8 años dedicándonos continuamente (también durante el estado de alarma) a apagar fuegos de nuestros clientes, transformando sus problemas en soluciones estimulantes y creativas.
Ahora que la nueva normalidad parece que empieza a instalarse y el verano ha llegado, hemos decidido retomar estas imágenes de felicidad e ingenuidad de un pasado que tardará bastante en volver (si es que lo hace). Lo que tenemos claro es que con corona o sin corona #dikamola. Y seguimos apostando firmemente por un #yelloworld que durante el confinamiento fue más necesario que nunca. Esa idea de «mundo creativo amarillo y feliz» sigue presente en nuestros corazones. Con corona o sin corona ningún virus va a doblegar nuestra determinación por mejorar el mundo de la mano del diseño y la arquitectura.
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Os invitamos a reíros un rato y recordar que todo lo bueno volverá y que las coronas sean solo un recuerdo de otro virus que conseguimos vencer. Nosotros las tenemos colgadas en el estudio cual trofeo de caza mayor, como recuerdo de la fina línea que separa lo mejor y lo peor. Por eso cada día luchamos para engrosarla. Felices de sobrevivir y prosperar en este loco y amarillo planeta #yelloworld.
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