05 Sep La Noria de Málaga: ¿Una Noria a su altura?
.
LA ALTURA DE LA NUEVA NORIA DE MALÁGA
Tras unos días en funcionamiento y habiendo digerido ya, según el caso, la euforia, sorpresa y/o estupor inicial, la pregunta que nos hacemos es ¿Esta la nueva noria de Málaga a la altura de esta ciudad? La nueva noria de Málaga tiene 70 metros de altura, a bote pronto pudiera parecer una altura interesante, ilusión que se despeja en cuanto empezamos a compararla con otras norias de ciudades de referencia: la noria de Málaga es casi la mitad de alta que el celebrado London Eye (la noria mirador de Londres instalada junto al Támesis) y una enana si la comparamos con los 175 metros del Singapore Flyer (la noria más alta del mundo), en cuanto a las norias españolas su posición mejora empatando con sus gemelas en Valencia y Zaragoza (montanas y gestionadas por la misma empresa que la de Málaga). Cierto es que la noria de Málaga es algo más alta, por ejemplo, que la noria instalada en el jardín de la Tullerías de París de 60m. o la del centro de Viena (65m.), para ser justos también habría que apuntar que la noria de Málaga es móvil, al estilo de las instaladas en las ferias, por ello, conforme aumenta su altura y a partir de un cierto punto, se convierte en un elemento económicamente poco atractivo.
De todas formas en esta entrada no nos planteamos el problema de altura de la noria de Málaga como una competición de metros o centímetros al estilo de las frenéticas (y ridículas) carreras por obtener el título del edificio más alto del mundo, o del rosco más grande de la zona sur oriental del fondo a la derecha de cualquier isla. Aquí nos plantearemos la altura de nuestra nueva noria en un plano más amplio, altura de miras, nunca mejor dicho.
LA NORIA ¿OTRA TIBIEZA MADE IN MÁLAGA?
Cualquiera podría atajar esta reflexión espetando que Málaga no es Viena, ni Londres ni Las Vegas, es cierto, por eso mas allá de la comparación con otras norias o ciudades vamos a comparar la altura de la noria de málaga con los hitos verticales de la ciudad y para nuestra sorpresa (sarcasmo) la nueva noria no es el elemento construido más alto del centro de la ciudad que por supuesto corresponde al Castillo de Gibralfaro que alcanza los 130 metros sobre la altura del mar, aunque claro, el 90% de esa altura corresponde al monte sobre el que se asienta. Si nos ceñimos estrictamente a la altura de los elementos construidos sobre su rasante (despreciando la topografía) las gruas del puerto se llevan la palma con sus 100 metros de altura y si alguien considera que ese elemento tan funcional y sincero, pues es pura estructura, no cuenta, nos queda entonces que el edificio más alto de la ciudad alcanza los 93 metros conquistados por la única torre terminada de nuestra Catedral.
Pues bien, según hemos visto, la actual noria cuya principal labor es permitir mirar la ciudad desde arriba, se eleva la mitad que el punto más alto del centro de Málaga, es bastante más baja que sus vecinas grúas del puerto y que la propia Catedral situada a poco metros. Y eso que hemos sido buenos dejando fuera de la tabla a las antiguas torres industriales por no ser accesibles (de momento) como miradores y no contabilizando tampoco la chimenea de la torre de la araña que son sus 114 metros marca el techo construido de Málaga.
A la vista de los datos la pregunta se responde sola: ¡sí!, la noria de málaga como hito es bastante tibia, al menos como hito en altura. Pero vamos a darle otra oportunidad, ¿Puede su diseño o estructura aportar algo vibrante e interesante que pueda catapultarla al plano del hito ingenieril, como en su momento hizo la Torre Eiffel o el Puente de San Francisco? rotundamente no, es más, comparada con las norias de Londres o Singapur la estructura de la noria de Málaga es bastante poco atractiva y nada emprendedora (esta palabra que tanto nos gusta ahora en España). Cierto es, que aporta otro punto de vista nuevo para ver la ciudad ¡Solo faltaría! El piso de mi amiga Elena (un 12º) también aporta un punto de vista nuevo de la ciudad y quizás más interesante, pues al tomar distancia se puede observar todo el conjunto del centro mejor contextualizado.
Por supuesto, estamos a favor de crear nuevos espacios donde la ciudad se mire, se reconozca y se disfrute, eso ayuda a crear conciencia de ciudad, algo absolutamente necesario si Málaga aspira a ser una Capital que pueda codearse con Madrid o Barcelona. Igualmente necesario para esto, es como la construcción de hitos, de elementos que materialicen y proyecten la idea de ciudad vanguardista, abierta y dinámica que pretendemos. Desde luego esta noria no será uno de ellos.
MIEDO, PERO MIEDO ¿A QUÉ?
Algunos podrán considerar esta entrada como un ataque a la nueva noria de Málaga, una crítica que se alinea con aquellos que tuvieron miedo de instalarla en el centro, porque podía romper la imagen del centro histórico, nada más alejado de la realidad, miedo ¿Miedo a qué? ¿A caso Tuvieron miedo Manuel Cabanyes y Juan Jáuregui cuando proyectaron el edificio de la Equitativa, ese pequeño rascacielos ecléctico construido en la misma puerta de Calle Larios? ¿Tuvieron miedo los 8 alcaldes que permitieron la apertura de la propia Calle Larios en sus 4 años de construcción a finales del s.XIV? y así podríamos aburrir con ejemplos en Málaga o en las grandes ciudades del mundo.
Y es que los grandes hitos, las grandes conquistas de las ciudades se han conseguido arriesgando, transformando e incluso trasgrediendo ¿Miedo a colocar una mole de hierro de 300 metros de altura en el centro de París? Hoy la Torre Eiffel es el hito más importante de París y un icono mundial. Lo difícil es separar el grano de la paja, al grupo de radicales conservacionistas locales de la época el derribo de las viviendas necesarias para abrir Calle Larios les hubiera parecido un sacrilegio contra la ciudad y la historia, hoy los nietos de aquellos se rasgarían las vestiduras si alguien osara tocar una teja de su Larios querida, claramente aquellas viviendas eran paja, en cambio La Mundial o el desaparecido silo del puerto eran grano.
Ahora también en el puerto aparece paja donde podría haberse instalado grano. Puestos a tener una noria en Málaga, en un puerto que esta despertando a la ciudad, en un punto que próximamente se abrirá al centro, enfrente del sietemesino barrio del SoHo, puestos a tener una noria de Málaga, tengamos una noria única, atrevida, innovadora, bella, alta, ¡arriesguemos! Málaga no es Granada ni Sevilla (a ver si lo aceptamos ya), por lo tanto aquí no cabe el conservacionismo fetichista que lucha por perpetuar inalterado y congelado en el tiempo un centro histórico que eleva a sagrado la meta de llegar a ser un parque temático de si mismo, un decorado de cartón piedra, un sepulcro blanqueado. Málaga tiene monumentos históricos valiosos, Málaga afortunadamente aún conserva hitos interesantes que debemos proteger y marcar como grano y Málaga, por supuesto, tiene mucha historia, pero su peso no es ni debe ser tan grande, no debemos caer en el error histórico de otras ciudades auto tematizadas. Sin ese lastre extra, podemos navegar más rápido, más lejos y más valerosamente que los demás, con la suerte además de estar ya en el mar, en el mejor mar, ese que baña un nuevo puerto, recientemente coronado por una noria que definitivamente no esta a la altura del futuro que debemos construir entre todos para esta ciudad.
Fotografías vía Lefoe.com