14 Abr ¿Qué es el diseño estratégico?
Es un enfoque renovado del diseño que busca enfrentar las complejidades cotidianas. El pensamiento tradicional ya no nos sirve para resolver los desafíos que enfrentamos hoy en día.
El diseño estratégico o de estrategias no solo busca solucionar problemas para los productos o servicios que ofrecemos los diseñadores, sino que se integra en el ADN de las empresas para tratar los problemas que puedan surgir en las metodologías. Su finalidad es conseguir una ventaja competitiva, que ayude a las organizaciones y negocios a distinguirse, no sólo a sobrevivir.
El diseño de estrategias o diseño estratégico
A través del diseño estratégico no se contemplan las etapas de creación como componentes separados, sino como un sistema que se relaciona entre sí. Y es que tomar decisiones sobre uno afecta a todo el sistema, en este caso, a toda una empresa u organización.
Mediante esta nueva forma el diseño como disciplina se interrelaciona con la visión estratégica de los negocios y el enfoque de la investigación. Esto consigue plantear una estrategia capaz de explotar las oportunidades de negocio, minimizando las amenazas que presenta el exterior y la competencia. Consiguiendo optimizar los resultados, ya sean mejoras en el producto, aumento de ventas, mayor número de afiliaciones o mejorar la reputación de marca.
El proceso del diseño estratégico
Podemos resumir la implementación del diseño estratégico en las siguientes fases.
Evaluar
Comprender el proyecto de manera integral, incluyendo un análisis de restricciones, oportunidades y una visión general, además de comercial. Uso de herramientas como el DAFO.
Comprender
Tanto en términos de diseño como en objetivos comerciales; se debe relacionar el resultado que pretendemos obtener con los objetivos de la empresa y mostrar los resultados clave que ayudarán a respaldarlos.
Aprender
Realizar preguntas estratégicas para aprender más sobre el propio negocio, encargo y clientes o usuarios. Por ejemplo: ¿Para quién estamos diseñando este producto? ¿Qué necesita el cliente? ¿Qué podemos ofrecer para diferenciarnos de la competencia?
Ejecutar
Actuar según la estrategia y asegurarse de que todo el equipo está incluido. El pensamiento estratégico funciona mucho mejor cuando se trabaja en grupo de manera colaborativa.
Comprobar
A medida que se realizan las tareas durante el proceso de diseño, es imperativo reevaluar su efectividad con la finalidad de lograr los objetivos y resultados que se prevén.
El Design Thinking. Diseño estratégico
Es una de las metodologías más usadas en el diseño estratégico. El Design Thinking es tan básico que se puede resumir como el proceso utilizado para analizar un problema con la finalidad de encontrar la solución más óptima para el usuario final.
Es una estrategia que se vale de la sensibilidad y métodos de los diseñadores. Su finalidad primordial es conseguir que las carencias de los usuarios se alineen con lo que es tecnológicamente factible y con lo que una estrategia viable de negocios puede convertir en oportunidad de mercado.
Al priorizar al consumidor, se puede solventar con éxito sus exigencias y de esta manera mejorar los resultados. Siempre teniendo en cuenta la conversión y transformación del producto, su evolución en el mercado, el uso de tendencias y cómo estas afectan al diseño, la investigación y el uso de la psicología en las estrategias publicitarias del mismo.
Etapas del proceso
El proceso de diseño estratégico sigue un enfoque estructurado y centrado en el usuario, que se desarrolla a través de varias etapas clave. Estas etapas permiten a los equipos de diseño abordar problemas complejos de manera holística, asegurando que las soluciones propuestas sean no solo innovadoras, sino también efectivas y alineadas con las necesidades reales de los usuarios. A continuación, se describen las etapas fundamentales de este proceso:
Empatizar
Para comprender las necesidades de los usuarios implicados en la solución que se esté desarrollando, y también de su entorno.
Definir
Es el momento de clarificar los objetivos propuestos y los extraídos en la etapa anterior.
Idear
Se trata de generar opciones. No debemos quedarnos con la primera idea que se nos ocurra. En esta fase, las actividades como el brainstorming favorecen el pensamiento expansivo, intentando prescindir de los juicios de valor.
Prototipar
Consiste en construir maquetas previas para visualizar las posibles soluciones. Poner de manifiesto elementos que deben mejorarse, refinar o cambiar antes de llegar al resultado final.
Evaluar
En esta fase probamos los prototipos con los usuarios implicados en la solución que se esté desarrollando. Esta fase es crucial y ayudará a identificar mejoras, fallos, posibles carencias… Durante esta fase la idea evolucionará hasta convertirse en la solución que se está buscando.
Ventajas del diseño estratégico
Adoptar un enfoque de diseño estratégico trae consigo una serie de ventajas significativas tanto para el equipo de diseño como para la empresa en su conjunto. Estas ventajas no solo optimizan el proceso de creación, sino que también fortalecen las relaciones con los clientes, resultando en proyectos más exitosos y colaboraciones más duraderas. A continuación, se destacan algunas de las principales ventajas de este enfoque:
Eficacia
Al tener una estrategia de actuación clara y planeada junto al cliente, los proyectos se alinearán mejor con las necesidades de los mismos, teniendo menos revisiones y aprovechando mucho mejor el tiempo, la creatividad y el esfuerzo.
Colaboración
Esta nueva forma de diseño ayudará a la empresa en general, ya que trabajarán codo con codo para cumplir un objetivo común.
Mejor relación con el cliente. Si la empresa y el equipo de diseño trabajan para conseguir el mismo fin, el cual está alineado con los objetivos comerciales del cliente, las relaciones con el mismo serán más fuertes y duraderas. Esto resultará en un aumento de proyectos, transformando al cliente en prescriptor.
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